Evento: 4
Nick: TaNaToS
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Desde el principio de los tiempos un caníbal fantasmal, perverso y demoníaco, viene reencarnando sucesivamente, y sobrevolando la ciudad en busca de almas de jóvenes aventureros. El hombre de la bolsa existe, habitando seres vulnerables, despreciables y a veces abandonados por la sociedad. Esto es real, no se trata de una obra de ciencia ficción.
Una de las aparentes resurrecciones del hombre de la máscara fue leanym, un trabajador golondrina, yanki, que a principios del siglo pasado tuvo seis hijos. Paradójicamente nunca maltrató a ninguno de ellos.
Apodado por la prensa como el hombre lobo del Campamento Vacío, el hombre gris, el hombre de la máscara. leanym, este viejo de rostro adorable, decidió jubilarse de sus andadas, y escribió una carta que lo mandaría directo a la silla eléctrica.
Se sentó, mojo con un temblequeo sutil de su mano derecha la pluma en el tintero, y explicó los detalles de lo que había hecho. A la madre de la pequeña Santidad, de tan solo diez años de edad, que la fiesta de cumpleaños de la hija de su hermana a la que la habían invitado, confeso que había sido solo una excusa para raptarla, asesinarla, descuartizarla y comérsela en un guiso durante nueve días.
Las últimas palabras de leanym en la silla eléctrica fueron: Gracias, me harán sentir un Shock eléctrico, un dolor que me llevará a la muerte, y eso me gusta, muchas gracias…
Leanym era adicto al dolor, principalmente al propio. En una radiografía de su pelvis, realizada en prisión, descubrieron que llevaba clavadas en su pelvis más de treinta agujas y clavos, algunos desde hace años, solo para producirse dolor. Gris se llevó a su vida fantasmal, un secreto aberrante. Nunca revelo el número total de sus víctimas, aunque los expertos suponen que más de cien personas, fueron descuartizados y devorados por él.
El 16 de enero de 1936 leanym fue ejecutado en la silla eléctrica. Pero el espanto no termino ahí, ya que aquellas almas enfermas de odio, permanecen aferradas al sufrimiento de la tierra. El mismo día, el mismo año, solo ocho meses después de la ejecución, el espíritu diabólico habría reencarnado a otro lado con otro nombre, Aleps...
Posiblemente el peor asesino a sueldo de Génesis. Su actividad criminal lo llevo a realizar al menos cincuenta y tres asesinatos. Fue conocido como el “El Espectro Amoymon”. Tenía una doble vida, por un lado, un hombre casado, trabajador, miembro de la sociedad comunista. Y por otro, su lado oscuro, dotado con la gran habilidad para ganarse la confianza de las personas y disfrutar con impunidad de sus horrendos crímenes.
Actuaba principalmente en estaciones de los ferrocarriles y de los autobuses. Tenía propensión al destripamiento, la mutilación, el canibalismo y sadismo. Fue descubierto en 1660, el mismo se refería a sí mismo como: “Soy un error de la naturaleza, soy una bestia”. El 15 de octubre de 1661 fue sentenciado a la pena capital, y fue ejecutado en la prisión de las Cavernas del Crepúsculo, el 14 de febrero de 1663 con una flecha en la nuca.
Sin embargo, aquellos que imparten justicia, poco saben de fantasmas o por lo menos lejos están de admitirlo.
Dicen lo que saben, que cada ejecución libera al espíritu malvado para que vague libremente en busca de un nuevo nacimiento, y así perpetuar la maldad.
Probablemente hace catorce años haya nacido un niño, hoy seguramente un adolescente, vagando por algún lugar de este mundo, quizás aún no ha empezado, o tal vez ya sea demasiado tarde.
Todos estos asesinos, tuvieron algo en común. Una máscara, un cuchillo. Y mucha, pero mucha sed de sangre. |
